Punto cardinal: Sur
Simbolismo: Este término hace referencia al planeta Venus, considerado "la gran estrella" por parte de los mayas. Venus a su vez, encerraba un simbolismo relacionado con el concepto de ebriedad.

Las personas de signo Lamat son enérgicas, nerviosas, rápidas y necesitan estar en continuo movimiento.

Poseen una mente despierta, sagaz y rápida a la que le interesan los retos intelectuales como el debate y la discusión y a los que les gusta la competencia. A menudo los negocios llaman su atención y sus capacidades innatas hacen que tengan suerte en este tipo de asuntos. Pero pese a su inteligencia pueden llegar a ser un poco paranoicos e incluso autodestructivos.

Su necesidad de movimiento y de tener que estar siempre haciendo algo hace que tengan la necesidad de practicar actividades deportivas o que impliquen movimiento como puede ser la danza. Además, su gran energía les permite ejercitarse durante mucho tiempo sin que se cansen.

Suelen ser personas a las que les gusta el humor y la música y por ello muchos acaban por dedicarse profesionalmente a la interpretación o al entretenimiento. Pueden llegar a ser muy egocéntricos, pero tampoco es tan común esta cualidad en ellos como pueda pensarse.

Destacan también profesionalmente en tareas relacionadas con la observación de detalles, la resolución de misterios, la psicología y el ocultismo.
Son algo reservados respecto a las personas a las que no conocen, de las que tienden a desconfiar, pero una vez que alcanzan un cierto grado de entendimiento, pueden convertirse en amigos muy leales.

El desafío que deben emprender en sus vidas es el de lograr terminar lo que emprendan. La clave para lograrlo será que aprendan a seleccionar cuidadosamente a amigos y amantes y evitar los extremos.