La estación de la primavera, a caballo entre el invierno y el verano, es el momento perfecto para que las personas recarguemos nuestras energías tras el invierno, estación en la que habitualmente éstas tienden a debilitarse a causa del frío y la falta de sol (que proporciona una fuente de energía importante).

El problema es que a menudo solemos concedernos tiempo para descansar y recargar energía sólo cuando estamos agotados, cuando esto no debería ser así. Tendríamos que aprender proporcionarnos el tiempo necesario para recargar nuestras energías y revitalizarnos.

La alimentación y la respiración juegan un papel importantísimo para revitalizar nuestra energía, pero también otros factores vinculados a la relación con nuestro entorno como son los amigos y el ocio. Todos son fuentes de energía positiva.

- LA ALIMENTACIÓN
La clave para estar llenos de energía está en comer de todo, muy variado y hacerlo cinco veces al día. De esa forma nos aseguramos una alimentación variada y aumentamos el gasto calórico manteniendo alto el metabolismo.
La mayor fuente de energía se encuentra en frutas y verduras, alimentos ricos en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes que ayudan a prevenir enfermedades y el envejecimiento. En primavera es aconsejable consumir lechuga, espárragos, ajos frescos, setas, cerezas, ciruelas, fresas, albaricoques o melocotón para obtener una dieta menos grasa y combatir las alergias típicas de esta época del año.
Por otro lado existen grandes ladrones de energía que solo aportan calorías vacías y que conviene evitar como son la bollería industrial.
Además resultan aconsejables una serie de consejos tanto en primavera como durante el resto del año como son: consumir diariamente fruta, aliñar las ensaladas con unas gotas de limón, tomar té verde o blanco, comer chocolate puro y beber medio vaso pequeño de vino tinto en el almuerzo y cena.

- LA RESPIRACIÓN
La respiración es una fuente vital de energía, pero puesto que la llevamos a cabo de forma mecánica no le concedemos la importancia que realmente tiene. Cuando exhalamos expulsamos de nuestro cuerpo anhídrido carbónico (los desperdicios) por lo que si no respiramos bien lo que hacemos es almacenar aire contaminado en nuestros pulmones. Además, si no respiramos bien esto puede afectar al metabolismo de los alimentos que ingerimos o impedir que el cerebro, que es el órgano que más oxígeno consume, se oxigene adecuadamente y funcione correctamente,
Durante la primavera es recomendable salir al sol, dar un paseo respirando profundamente (mejor si lo hacemos respirando de forma abdominal) y estar en contacto con la naturaleza, puesto que al ser más puro el aire que percibiremos respiraremos mejor.

- EL OCIO
Disfrutar del tiempo de ocio solos o en compañía dedicándonos a una actividad que nos resulte placentera, nos haga sentir bien con solo llevarla a cabo y que suponga un paréntesis de nuestras preocupaciones y obligaciones. En primavera es recomendable realizar actividades de ocio al aire libre (pasear, tomar algo en una terraza o incluso pensar en nuestras cosas… cualquiera es válida siempre y cuando nos resulte gratificante). Practicar deporte es también una buena recomendación y no es necesario ni aconsejable realizarlo hasta la extenuación.

- LAS AMISTADES
Las amistades son una fuente de energía importante siempre que no se vivan de manera impuesta. Si una amistad es verdadera, los aspecto en los que se base (es decir, aquello por lo que la valoremos) serán nuestro motor (por ejemplo una forma común de ver las cosas, gustos comunes, valores, etc…) Para aprovechar esta fuente de energía debemos iniciar y fomentar aquellas relaciones que nos resulten más gratificantes a un ritmo satisfactorio para ambas partes.
La primavera es el momento idóneo para quedar con los amigos, algo que por otro lado, no deberíamos dejar de hacer nunca.