Horóscopo de Hoy

El niño Leo

El niño Leo es un niño con madera de líder y lo demuestra desde el primer instante que llega al mundo. Le gusta ser el centro de atención y no duda en ponerse a llorar desconsoladamente cuando observa que su familia deja de hacerle caso.

Es un niño alegre y risueño... cuando se sale con la suya. Cuando sucede lo contrario se enfada y se muestra ofendido. Esto es algo que hay que corregir, sin duda, aunque con cuidado de no lastimar su ego para siempre. Además, es un niño inquieto y activo, aunque cuando vaya creciendo se mostrará de vez en cuando perezoso y holgazán. En esos momentos la clave está en no ceder a sus órdenes. Hacerlo sólo hará que lo malcriemos y que el día de mañana sea incapaz de respetar los derechos de los demás.

Como buen líder, a veces tiende a ser mandón con sus iguales, lo que sin duda es mejor modificar en sus primeros años de vida aunque eso sí, con tacto y argumentos. Reñirle delante de sus amigos del colegio es algo que le ofendería profundamente, así que si hemos de hacerlo mejor que sea en casa y hablándole como si fuera una persona mayor.

Vinculado a su liderazgo están sus ganas de llamar la atención. Son capaces de subirse a una ventana para conseguir así que todos sus compañeros de clase los miren. Pero, pese a estos alardes de exhibicionismo es un niño que saca buenas notas y al que aptitudes no le faltan. Le gusta explicar cosas a los demás, son inteligentes y aprenden muy deprisa.

Si se da el caso de que bajan en su rendimiento escolar con ellos hay un truco que nunca falla: apelar a su vanidad. Recordarle que puede demostrar su superioridad frente al resto sacando las mejores notas será el mejor aliciente que puedas darle. Eso sí, no olvides de felicitarle cuando lo consiga porque también lo necesitará para no perder la motivación.

Cuando crezca será uno de los primeros signos en descubrir al sexo opuesto. Tendrá una adolescencia con constantes idas y venidas emocionales, grandes amores y terribles dramas. En esta etapa de su vida es bueno darle la libertad que necesite y dejar a un lado las órdenes, a las que no hará ningún caso y que además destruirán su orgullo. Demostrarle que confías en él será muy positivo y hará que te devuelva esa confianza.

Criar a un niño Leo no será una tarea fácil. Sin embargo, hacerlo con una disciplina suave que utilice más diálogo que órdenes, combinada con el amor y afecto, que necesitan, darán muy buenos resultados y te demostrarán que el león “no es tan fiero como lo pintan”.