Atraídos uno hacia el otro en el primer encuentro, unidos por la misma sensibilidad y visión humanitaria, creen haberse encontrado como almas gemelas. A su vez, son atraídos por las cualidades y excentricidades que tienen en común.
Después de breves o incluso largos períodos, se descubren los defectos: confuso y con tendencia a ser infiel, Piscis, demasiado audaz y libre, Acuario. Su irrealidad puede ser positiva en el período de noviazgo, pero las primeras dificultades prácticas de la vida matrimonial pueden hacer tambalear el hermoso castillo en el aire sobre el cual apoyaron sus sueños.
Los Piscis deberán ser más tolerantes con las debilidades y las excentricidades de Acuario; aunque Piscis tiende por naturaleza a poner un gran empeño en complacer a la gente, algunas veces puede que Acuario lo desconcierte e irrite.
La mayoría de los Piscis entienden la vida a través de sus percepciones parapsicológicas. La influencia de Urano en Acuario debería darle también la capacidad de intuición y el poder adivinatorio que tiene Piscis. Sin embargo, Acuario prefiere someter todo a prueba antes de realizar conjeturas, para luego apostar a lo seguro.
Los nativos que reciben la influencia de Neptuno, son soñadores; en tanto que los nativos regidos por Urano, los superan con su esquema delirante. A Piscis le encanta la música, el arte y la poesía; a Acuario también le gustan estas cosas, pero quizás prefiera un gráfico más moderno.
En el plano económico, se entenderán bastante bien ya que ambos son despistados con las cuentas. Acuario puede contar cada centavo con sumo cuidado, para luego olvidarse de la suma total.
En el aspecto sexual, Acuario se siente atraído por el misticismo de Piscis, en tanto que éste, es uno de los pocos signos del zodiaco que entiende a Acuario. Es un punto importante, en especial durante en el inicio de la relación. La influencia de Venus sobre Piscis hará que la intimidad sea muy satisfactoria para ambos nativos, permitiéndoles experimentar nuevas sensaciones.
Para que una relación entre Acuario y Piscis prospere, deberán aceptar sus pequeñas diferencias de caracteres. Ambos son seres especiales y suelen estar más conectados con la vida espiritual y la metafísica, que con la de la Tierra misma. Es por ello que pueden llegar a entenderse muy bien, si dejan pasar algunas cuestiones menores.